viernes, 24 de febrero de 2012

Whitesnake - Whitesnake (1987)


Si hablamos de clásicos indispensables, el disco en el que nos sumergiremos es una parada obligatoria para comprender la magia y el éxito que envolvió la inolvidable música de los 80's la cual nos dejó una muy nutrida variedad de subgéneros si de rock pesado hablamos. Para mediados de esta década el vulgarmente conocido Hair Metal se estaba apoderando descaradamente de las emisoras y de los programas musicales en donde se revelaba como el lado más pasteloso y blando del Metal. Ratt, Dokken, Bon Jovi, Def Leppard y Mötley Crüe eran algunos de los nombres que empezaban a ser cada vez más aclamados por las masas, gracias a la efectiva combinación de Heavy Metal y Hard Rock de fáciles estructuras musicales, melodías empalagosas y líricas que en su mayoría hablaban de mujeres, fiestas y sexo. Muchas agrupaciones vieron en este sonido la fórmula perfecta para alcanzar la fama, el suceso más exitoso fue el logrado por la legendaria banda inglesa Whitesnake y su estratosférico 1987.

En 1984 la banda de David Coverdale había lanzado al mercado el elegante y hard bluesero Slide It In asegurándose un puesto en la compañía discográfica Geffen Records, la banda aunque parezca increíble apenas estaba empezando a cosechar fama en los Estados Unidos a pesar de tener ya varios discos a sus espaldas y del renombre de sus integrantes. Luego de haber participado en la primera edición del Rock In Rio, en donde compartieron escenario con pesos pesados de la industria como Scorpions, AC/DC, Ozzy Osbourne y Iron Maiden, el mítico vocalista decidió que era momento de cambios así que lo primero que hizo fue dar el carpetazo definitivo a su relación con los demás miembros del grupo, exceptuando a Neil Murray en el bajo (quién había sido despedido de la banda en el 82' para regresar en el 84') y a John Sykes en las guitarras (que había grabado con Thin Lizzy y llevaba en la banda desde el 83'), este último siendo una de las piezas esenciales para la renovación musical que buscaban.

Coverdale y Sykes se trasladaron a Francia para el proceso de composición el cual fue finalizado en cuestión de días, posteriormente junto a Murray se movieron a Los Angeles para la búsqueda de un baterista, luego de las respectivas audiciones el puesto le fue concedido al también ingles Aynsley Dunbar (Frank Zappa, Journey) y para terminar de completar el equipo se unió Mike Stone como productor. Debido a la fama en asenso que la banda estaba alcanzando Coverdale planificó re grabar dos de sus temas clásicos, Here I Go Again y Criying In The Rain, ambos previamente incluidos en el álbum Saints And Sinners. La  grabación vino acompañada de fabulosas colaboraciones, Don Airey y Bill Cuomo se encargarían de las pistas de teclado mientras que el holandés Adrian Vandenberg (que había rechazado unirse a la banda años atrás) contribuiría con un solo en la nueva versión de Here I Go Again.

Mike Stone, Don Airey y David Coverdale durante el proceso de grabación en 1985

Las cosas marchaban de viento en popa y la grabación iba a empezar cuando repentinamente inconvenientes empezaron a afectar el proceso, John Sykes empezaba a ejercer demasiada presión en el trabajo de Dunbar haciendo que este último desempeñara prácticamente un papel de músico de sesión, además de eso el guitarrista estaba obsesionado con el sonido que quería para su guitarra en el disco, esto hizo que Coverdale llame a su viejo amigo Bob Rock quien ayudó a conseguir el determinado sonido, dejando finalmente satisfecho al guitarrista. Una vez que todos los instrumentos habían sido grabados era el turno de comenzar con las pistas vocales, cuando Coverdale empezó a grabar las voces algo no iba bien, se oía muy nasal, impresionado por este hecho visito a su medico el cual le dijo que todo se debía a un fuerte resfriado, las semanas pasaban y las cosas no mejoraban, el líder empezaba a preocuparse y temía haber perdido la voz que tanto lo caracterizaba, mientras tanto el resto del equipo empezaba a impacientarse al punto de que tanto Sykes como Stone sugirieron que alguien más cante en el disco, esta fue la gota que derramó el vaso para el vocalista, decide despedir al productor y mantiene en la mira al guitarrista.

Ya con un diagnóstico oficial de su problema vocal, el cual resultó ser una severa sinusitis, David Coverdale necesitó de cirugía y antibióticos para combatir su molestia, debido a esto la grabación tuvo que ser pospuesta indefinidamente. Luego de una larga recuperación el vocalista terminó sintiéndose inseguro de sus capacidades, teniendo que tomar clases de canto por primera vez en su vida de la mano de Keith Olsen quién de paso terminó produciendo y mezclando el disco. La estancia de Sykes en la banda llegó a su fin cuando en una batalla de egos, decidió confrontar a Coverdale resultando despedido, por su parte Dunbar y Murray también abandonaron la banda y presentaron cargos legales en contra del líder, alegando el pago injusto de regalías.

Finalmente el disco salió a la luz el 7 de abril de 1987, oficialmente fue llamado Whitesnake en América y Europa (en la versión europea se incluían 2 temas extras: You're Gonna Break My Heart Again y Looking For Love además de diferente orden en el track list) mientras que en Japón llevo el título de Serpens Albus (el nombre de la banda en latín), en una entrevista Coverdale sugirió a los medios llamarlo simplemente 1987 para así evitar confusiones con su primer obra en solitario. La portada que estuvo a cargo de Huge Syme es toda una declaración de intenciones ya que el clásico logotipo que la banda había utilizado en sus anteriores tapas fue sustituido por uno más acorde a la época y al nuevo sonido de la banda. 

La propuesta musical de la Serpiente Blanca fue totalmente reinventada de la mano de una producción sobresaliente, las guitarras son una furiosa marejada de riffs en su mayoría orientados al Heavy Metal, la base rítmica totalmente demoledora y un Coverdale que a pesar de haber sufrido ese desliz en su voz, roza la perfección alcanzado notas que jamás imaginó y liberando testosterona en cantidades alarmantes!! No todos son temas asesinos ya que también encontramos algunas lentas que rebosan de feeling por los cuatro costados.

El disco arranca con la nueva versión de Crying In The Rain, un tema épico de principio a fin sobrado de garra, en sí mucho más pesado que su versión primigenia pero conservando su esencia bluesera. Coverdale se sale completamente con una voz muy ceñida y un feeling que sencillamente deja pasmado a cualquiera, la letra es un encanto.. The sun is shining.. but it's raining in my heart. No one undestands the heartache, no one feels the pain, 'cos no one ever sees the tears when your crying in the rain... La versión originó debates entre los fans mas puristas ya que mucho se decía de que superaba a la original. El segundo corte es Bad Boys, una verdadera montaña rusa de riffs en donde Sykes deja mas que confirmado su poderío en las 6 cuerdas, a medio tema ejecuta un feroz y arrollador solo de guitarra. Aquí también nos topamos con uno de los estribillos mas pegadizos en la historia de la banda ...I know you, you know me, I'm the black sheep of the family... Coverdale en plan lobo se marca unos aullidos al comienzo del tema como si estuviera invocando a su pandilla de chicos malos.

El siguiente tema es uno de los mas legendarios en la historia de Whitesnake (el video ni se diga) inamovible de su set list, hablamos obviamente de Still Of The Night  o mejor dicho: la mejor canción que Led Zeppelin jamás compuso (esta es sólo mi opinión eh!) ...In the still of the night I hear the wolf howl honey, sniffing around your door... In the still of the night I feel my heart beating heavy, telling me I gotta have more... así empieza Coverdale el tema con una melodía vocal que se asemeja a la de Black Dog de los Zepp seguido de un riff que en un dos por tres te vuela la tapa de los sesos, ya a los 50 segundos nos encontramos con un grueso muro de guitarras (headbanging asegurado) para que finalmente el vocalista británico termine de rematarlo todo con eso de ...Now I just wanna get close to you taste your love so sweet (acento provocativo en sweet!) and I just wanna make love to you, feel your body heat... In the still of the night!... ya casi entrando a la mitad el tema se desarrolla en un ambiente épico y pausado con un Coverdale susurrante acompañado de unos teclados de fondo, todo esto seguido de una sección de violines de infarto! Después del excelente solo de Sykes el track vuelve su estructura principal riff /estribillo/coro hasta que finalmente se desvanece, dando por terminada una de las mejores composiciones en la historia del rock. 

Los bombazos siguen lloviendo, ahora es el turno de Here I Go Again, otra de las re grabadas que igualmente goza de mayor contundencia que su original, además que a día de hoy es la canción mas conocida de la banda (gracias a su famoso video) junto a Is This Love. El track da inicio a partir de unos bellos teclados que dan pie a un Coverdale totalmente iluminado, progresivamente la sección rítmica se va sumando hasta desembocar en uno de los coros mas famosos de la banda ...Here I go again on my own, going down the only road I've ever known, like a drifter, I was born to walk alone... el solo lleva la firma del holandés Adrian Vandenberg, sin duda uno de los temas mas cautivadores. Continua la clásica Give Me All Your Love un tema más en la línea de lo que la banda había hecho anteriormente pero con un coro 100% comercial, el estridente solo ejecutado por Sykes a la mitad es una verdadera locura.

Continua el archiconocido hit Is This Love, es la balada y es en donde presenciamos a la estrella, Coverdale, en una muy sentida interpretación que deja la piel de gallina ...I should have known better, than to let you go alone ...it's times like these I can't make it on my own. Wasted days, and sleepless nights... and I can't wait to see you again... la sección rítmica parece palpitar suavemente junto a los punteos de guitarra y a la mitad nos encontramos con un refinado solo, el tema en si rebosa de erotismo a raudales. El espectáculo sigue con Children Of The Night, aquí la banda va directo a la yugular y nos regala un tema directo, lo de Murray y Dunbar es algo totalmente destructor, Sykes se luce con un riffeo cañero y contagioso, a la mitad se marca un solo lleno de pirotecnia que le saca chispas al mástil, la perfomance del señor Coverdale ya a estas alturas creo que no se puede explicar, dejémoslo en legendario ...Now are you ready to rock? ..children of the night!

Para terminar nos encontramos con los 2 últimos cortes, ambos muy decentes pero que de alguna forma bajan el listón general, el primero es Straight For The Heart, posee un ritmo rápido y unos delicados teclados que adornan el desarrollo del tema, además de un coro repetitivo y muy pegadizo. Cierra Don't Turn Away otro tema lento y un tanto facilón, sin duda lo mejor de la composición es el bellísimo solo por parte Sykes a la mitad. Así finaliza uno de los álbumes con mas grande huella en la década de los 80's, muchos intentaron igualar la magia que lo envolvía pero terminaron siendo intentos fallidos.

 De izquierda a derecha: Rudy Sarzo, Adrian Vandenberg , David Coverdale, Tommy Aldridge y Vivian Campbell

El disco vendió 6 millones de copias solamente en los Estados Unidos, con el dinero suficiente y con una prometedora gira de por medio David Coverdale decidió armar un supergrupo: Adrian Vandenberg y Vivian Campbell en las guitarras, Rudy Sarzo a las 4 cuerdas y Tommy Aldridge aporreando las baquetas. Esta nueva versión de Whitesnake fue la que encaró el éxito y realizó 4 videoclips que gozaron de una envidiable rotación en la MTV llevándolos a la categoría de clásicos, estos fueron: Still Of The Night, Is This Love, Here I Go Again y Give Me All Your Love, en donde además aparecía la despampanante actriz norteamericana Tawny Kitaen (por aquel entonces esposa del líder de la banda) dirigiendo el suceso a cuotas desorbitantes. En resumen, un álbum indispensable que no dejará indiferente a todo amante de la buena música, al ser uno de los mas grandes sucesos en la historia del rock tanto en lo comercial como en lo musical. En fin 100% recomendado! 

Track List:
1. Crying In The Rain
2. Bad Boys
3.Still Of The Night
4. Here I Go Again
5. Give Me All Your Love
6. Is This Love
7. Children Of The Night
8. Straight For The Heart
9. Don't Turn Away

Line up:
David Coverdale: voz
John Sykes: guitarra
Neil Murray: bajo
Aynsley Dunbar: batería
Invitados:
Don Airey y Bill Cuomo: teclados
Adrian Vandenberg: solo en Here I Go Again

Videoclip de Still Of The Night


Videoclip de Is This Love


Videoclip de Here I Go Again


Videoclip de Give Me All Your Love



Judasmetalfan

martes, 21 de febrero de 2012

Queensrÿche - Promised Land (1994)


"Alcanzar la Tierra Prometida es una metáfora para obtener el Sueño Americano de prosperidad, de materialismo y de felicidad los cuales se derivan de la posesión de cosas materiales. La imagen fabricada que constantemente nos es vendida de que el materialismo nos hará felices es, supongo, el único hecho real en nuestra sociedad de simulación y consumismo." Geoff Tate 

¿Qué ocurre con una banda que después de llegar a la cima del éxito, decide observarse fijamente al espejo para analizar dudas que para aquel entonces deberían estar resueltas? Ese fue el dilema que vivió Queensrÿche, banda que resultó ser todo un suceso en el panorama heavy de los años 80's, cosechando desde sus inicios una carrera fructífera en donde si bien desarrollaron un sonido muy personal y maduro, cada disco sonaba diferente al anterior, hecho que solo esta al alcance de los grandes.

En 1988 habían lanzado al mercado su tercer álbum, el cual en nuestros días es considerado una de las piezas mas importantes del Heavy Metal: el Operation Mindcrime, obra vanguardista por excelencia que incluía elementos más progresivos además de relatar una de las historias mejores logradas en lo que a discos conceptuales se refiere. Luego de dos años asestaron el golpe definitivo con Empire, placa que consiguió triple platino (significando el de mayores ventas para la banda hasta nuestros días) y que los llevó a ser considerados superestrellas por los medios apareciendo en múltiples portadas de revistas y con videoclips que gozaban de notable transmisión en la MTV. El disco estaba plagado de temas de mas fácil digestión pero para nada carentes de calidad, los destellos progresivos se siguen aplicando en las melodías pero esta vez en menor medida. La Builiding Empires World Tour resultó ser la gira con mas fechas que la banda haya realizado, con una duración de 18 largos meses, ofreciendo shows que transmitían la misma energía que las producciones de estudio (uno de los puntos mas altos de la banda). 

Terminada la agotadora gira los 5 miembros notaron que a pesar del éxito logrado la relación como banda se estaba mermando además de que los problemas individuales seguían presentes. Acordaron tomar un descanso que duró algo mas de año y medio; debían desconectarse de todo y hacerse un auto análisis en donde era necesario re descubrir ese impulso y esa perspectiva como seres humanos que de alguna forma se había nublado por el éxito.

Para el verano del 93' los componentes decidieron que ya era tiempo de dar el siguiente paso y se situaron en la isla San Juan (frente a las costas del estado de Washington) en donde montaron su propio estudio y hogar durante 5 meses, la producción estuvo a cargo de la banda junto a James "Jimbo" Barton (quien ya había trabajado con ellos en sus dos obras anteriores). Libres de distracciones, alejados de los medios, sin presiones y rodeados de un ambiente relajado y natural emprenden la grabación más oscura y profunda en la carrera de Queensrÿche, el Promised Land.

La temática del disco se enfoca en un análisis introspectivo del ser humano en búsqueda de una identidad propia más allá de las buenas y malas experiencias, las victorias y las derrotas, y a la vez una crítica a la sociedad que basa sus cimientos en el consumo y el materialismo al vender la idea de que el éxito siempre conlleva a la felicidad haciendo de la vida algo superficial. En una entrevista Geoff Tate en tono gracioso mencionó que Everything You Need To Know About Life Itself, And How To Live It (algo asi como: Todo lo que necesitas saber sobre la vida misma y como vivirla) hubiera sido un nombre mas adecuado para el álbum en comparación al irónico título que ellos eligieron.

El disco empieza con la intro 9:28 A.M. un conjunto de sonidos extraños y un tanto desesperantes que desembocan en el llanto de un bebe, denotando el nacimiento de la criatura: el hombre; rapidamente se combina con el primer single del álbum I Am I con un comienzo de ambientación oriental seguido de un caos insistente cortesía del duo DeGarmo/Wilton y el crujiente bajo de Jackson, Rockenfield haciendo un trabajo magnífico tras los parches y un Geoff Tate que se encarna tan dramático como de costumbre, según la banda el tema es acerca del proceso psicológico de identidad que ocurre a temprana edad en donde el ser humano debe darse cuenta de lo importante que es ser un individuo diferente a los demás ...Close your eyes. Care to look inside? I am I!... dice el enérgico coro.

Continua Damaged con un riff sumamente aplastante y agresivo, aquí el que agarra el timón es Jackson y su mastodóntico bajo, Tate utilizando un registro mas grave y tenso nos habla de las heridas de una niñez tortuosa que acechan a un individuo en su etapa de adulto ...Mother Mary in control domineering stranglehold... dice la letra ¿un guiño al Operation Mindcrime? eso no se sabe, pero el tema tranquilamente pudo ser parte de aquel disco. Out Of Mind es un cándido medio tiempo que evoca fragilidad con un reluciente trabajo acústico, en la sección intermedia el tema es arropado por un bello solo de guitarra cortesía de DeGarmo, la letra nos habla de aquellas personas con problemas mentales que yacen olvidadas en los sanatorios.

Bridge es el segundo single del disco y fue compuesto en su totalidad por Chris DeGarmo, el guitarrista refleja la lamentable relación que tuvo con su padre biológico el cual lo abandonó en la niñez y luego de décadas sin comunicación le pidió que olvidara los errores que había cometido para así reconciliarse ...You say, son, let's forget the past, I want another chance, gonna make it last. You're begging me for a brand new start, trying to mend a bridge that's been blown apart, but you know... you never built it dad... dice el coro en una manera de enmendar la dolorosa herida. Musicalmente es una de las canciones mas sentimentales en la historia de la banda, todo en ella es perfecto, una acústica hermosa con una batería perfecta para la ocasión, un solo muy inspirado y una voz entristecida capaz que transmitir cada sílaba que pronuncia. En una entrevista el guitarrista reveló que su padre había fallecido mientras grababan el disco pero para ese entonces, ambos ya habían hecho las pases.

El tema homónimo surge en una atrapante atmósfera llena de texturas absolutamente oscuras y confusas que estalla en un riff profundamente cortante y denso, Promised Land es un tema de casi 8 minutos de duración que engloba la esencia del disco y la actitud que la banda vivía en aquellos años, un Geoff Tate acompañado de un panorama completamente desolado personifica a un individuo que clama desconsoladamente por respuestas a una vida llena de tropiezos y fracasos en donde la tierra prometida jamás fue encontrada ...Where did it all go wrong? I feel like I'm dying. Here's to love, to hate, to promises and Promised Land lies... canta totalmente abatido Tate. Un suave saxofón se difumina en la gran mayoría del tema junto a un duo de guitarras agudas y profundas, un bajo que suena como un martillo despiadado y una batería que marca como las agujas de un reloj. De a poco el tema se va fundiendo con sonidos de personas hablando, autómoviles y taladros, encerrando de esta manera el sonido típico de las grandes ciudades, así empieza Dis Con Nec Ted, un tema más mecánico que nos da la bienvenida con unas demoledoras notas de bajo junto a unas guitarras dinámicas, un saxo que se desdibuja nuevamente en la parte final y un Tate hablando entrecortado casi como si de un robot se tratase ...May..be all I need beside my pills and the surgery is a new me..thaphor for rea..lity... la letra es acerca de la necesidad de desconectarse del mundo que nos rodea a pesar de la tecnología que nos envuelve y nos une.

El siguiente corte es Lady Jane, otro medio tiempo que descansa en una elegante melodía de piano junto a una entristecida voz, en ella se retoma el tema de las enfermedades mentales, el resto de instrumentos caen mientras el tema se desarrolla acentuando la triste melodía. Los dos temas siguientes parecen salidos del Empire y del Rage For Order respectivamente pero con esa dosis extra de oscuridad, experimentación y tristeza que inunda el presente disco. My Global Mind es el tema mas diferente de todos y el de más fácil asimilación, con una base muy rockera y un excelente coro difícil de olvidar (el tema favorito del que firma esta reseña), aquí se examina el exceso informativo con el que los medios bombardean a la sociedad, continua One More Time, melodía que por un momento nos recuerda al ya lejano London que la banda había grabado en la década pasada, el track posee el mismo espíritu de las anteriores baladas en donde las guitarras lloran, líricamente es la continuación del tema título ..."Work hard in life boy, there's paradise in the end." Year after year we struggle to gain the happiness our parents never claimed... Finaliza la obra con Someone Else, un triste piano que acompaña hasta el final a un Geoff Tate que se calza una perfomance brillante a la vez que intimista y nos cuenta los pensamientos de un hombre que tras mirar en su pasado se percata de que era alguien completamente distinto a su presente, alguien que ha vencido los miedos que ayer lo agobiaban ...All my life they said I was going down, but I'm still standing, stronger, proud. And today I know there's so much more I can be... 

Así da por finalizado este viaje sensitivo, considerado por muchos (y por mí) como el último clásico de la banda, un disco decisivo a la vez que incomprendido en la historia de Queensrÿche, era la mejor forma de encarar aquellos fantasmas que abrumaban a la  banda y de llegar al último escalón de madurez musical. Requiere de varias escuchas poder asimilar la amalgama de detalles que engloba la obra pero una vez que te atrapa no hay descanso ni vuelta atrás.

Track list:
1. 9:28 A.M.
2. I Am I
3. Damaged
4. Out Of Mind
5. Bridge
6. Promised Land
7. Dis Con Nec Ted
8. Lady Jane
9. My Global Mind
10. One More Time
11. Someone Else?

Line up:
Geoff Tate: voz, saxofón
Chris DeGarmo: guitarra, piano
Michael Wilton: guitarra
Eddie Jackson: bajo
Scott Rockenfield: batería

Videoclip de Bridge 

Making Of Promised Land
Judasmetalfan

lunes, 20 de febrero de 2012

Malice - License To Kill (1987)



Nos ubicamos en 1987, uno de los años mas gloriosos para el rollo Heavy, nos encontramos con unos gigantes Whitesnake rejuvenecidos y arrasando las emisoras con aquel clásico álbum homónimo, a los míticos Guns N’ Roses, que ya empezaban a predicar aquello de Sex, Drugs And Rock & Roll con su mundialmente aclamado debut Appetite For Destruction, unos alemanes que llevaban por nombre Helloween los cuales sorprendieron a muchos por la melodía y vigor que impregnaban en ése legendario Keeper Of The Seven Keys Part I y sobretodo por el joven Michael Kiske que empezaba a inspirar a una nueva generación de vocalistas, a nuestros ex maquillados KISS que experimentaban en terrenos más melódicos y nos regalaban un acaramelado, pero excelente Crazy Nights. Entre estas y otras referencias sobresalientes que hicieron que este año dejara una cosecha para la posteridad, se encuentra una joya atrapada en el baúl del tiempo y que necesita ser rescatada con total justicia, ese disco se titula License To Kill.
 De izquierda a derecha: Mark Behn, Jay Reynolds, James Neal, Mick Zane y Clifford Carothers

Dos años atrás, los norteamericanos Malice habían lanzado un destacado álbum debut que llevaba por título In The Beginning… en el cual se evidenciaba notablemente que la propuesta musical y escénica de la banda no debía pasar inadvertida. Este quinteto procedente de Portland, Oregón (que luego de alcanzar el éxito y firmar con Atlantic Records, prosiguió su camino en Los Angeles, California) practicaba un Heavy Metal contundente, acompañado de uno que otro vestigio hard rockero, con el cual nos aseguraban caña, melodía y headbanging a borbotones.
Lo primero a destacar del disco es su sobresaliente, producción, la cual estuvo a cargo Max Norman, quien ha metido mano como ingeniero de sonido en obras clásicas tales como el Blizzard Of Ozz de Ozzy Osbourne, el Rust In Peace de Megadeth, y como productor en otras como el Visual Lies de Lizzy Borden o el Act III de Death Angel, entre otras. Cada uno de los instrumentos se percibe con nitidez y claridad, incluyendo el bajo que sin mayor dificultad surge con su grave sonoridad.

Un dato hay que acotar, es el de que la banda continuamente era comparada con Judas Priest, por lo que eran conocidos como la versión americana de estos. Todo un honor para la banda y una alusión totalmente merecida y envidiable.

En comparación a su obra primigenia, el License To Kill no solo es superior en producción sino también por el punto de madurez que la banda logró en ese lapso de 2 años. En donde cada tema tiene esa esencia tan propia que la banda había forjado.

Ahora pasemos ha analizar lo que se halla detrás de aquella amenazante imagen azul marino (la cual fue diseñada por Chris Polentz) en donde el asesino acaba de derramar más sangre con su hacha y nos observa fríamente, insinuándonos el poco tiempo de vida que nos resta. 

Un categórico abrebocas abre el telón, Sinister Double surge con unos extraños ecos en donde con sendos golpes de batería nace el dúo guitarrero de Jay Reynolds y Mick Zane cercenando acero como si de queso se tratase, James Neal se presenta como un híbrido entre Rob Halford, Bruce Dickinson y Geoff Tate…Casi nada, no?, disparando alaridos de manera incombustible, mientras que Mark Behn y Clifford Carothers en el bajo y batería respectivamente, hacen un trabajo contundente en la sección rítmica. Un muy buen solo de guitarra nos espera a la mitad, para que al final del tema, James nos deje pasmados con el memorable agudo que lanza para despedir este doble siniestro, dejando claro que él es el atractivo principal de la banda. 

El siguiente tema es el que titula el álbum, Licence To Kill con una base más hard rockera, se proclama como uno de los mejores temas de la placa, con ese ...Call me a rock ‘n roll outlaw. I got a license. I got a license to kill… y ese coro que aunque simple, tiene su encanto, la banda suena compacta, pero el culpable del escándalo es una vez más James Neal. 

Continuamos con Against The Empire, otro bombazo y tema predilecto para el que suscribe, destacado comienzo con ese aire épico a medias, la banda sonando mejor que nunca y un James Neal una vez más pletórico, subiendo y bajando a gusto. A medio tema nos encontramos con el mejor solo del disco para que luego una despiadada marcha de riffs nos martille los sesos, tema para delirar y de escucha incansable.
Con guitarras entrecortadas empieza Vigilante, variando el panorama de la placa, un tema cumplidor, con buenos momentos y un buen solo de guitarra. La adictiva Chain Gang Woman se abre paso con un riff bien groovie, aquí el quinteto rompe un poco los esquemas y se marcan un tema fenomenal, mención especial para Mark Behn con un trabajo estupendo al bajo.
Heavy Metal directo y de guitarras cortantes es lo que encontraremos en el sexto tema que lleva por nombre Christine, tema con una pequeña dosis de rock 'n roll inspirado en la novela de Stephen King del mismo nombre (la cual fue llevada al cine en 1983). Continua Murder, Heavy en toda regla como es de costumbre, una vez más aparece James y sus pulmones de acero haciendo destrozos por todos lados, la banda totalmente acoplada ejecutando solos cortos y directos. Breathin’ Down Your Neck sigue el juego del disco al igual que Circle Of Fire, Heavy Metal puro y sin fisuras. Así terminamos estos casi 40 minutos de los cuales no sobra ni un nanosegundo con dosis metálica sin descanso.
Un apunte significativo fue la colaboración de Dave Mustaine y Dave Ellefson de Megadeth junto a Jaime St. James y Tommy Thayer de Black N’ Blue quienes participaron en los coros del tema titulo y en Chain Gang Woman.
El éxito del álbum en cuestión llevo a la banda a su primera gira europea, en la cual fueron teloneros de Slayer, hecho que no fue del todo favorable, ya que al no tener una propuesta tan extrema como los de Araya y compañía, el público irritante y sediento de Thrash los abucheaba noche tras noche. Esta situación, acompañada de malas decisiones, hizo que el tiempo de vida del grupo llegara a su fin en 1989, tras lanzar un EP de 4 temas llamado Crazy In The Night.

Disco que mereció mejor fortuna pero que el tiempo ha sabido clasificar como uno de esos clásicos escondidos en el baúl de acero, totalmente recomendado si andas en busca de Heavy Metal de gran factura.

 Track list:
1. Sinister Double 
2. License To Kill 
3. Against The Empire 
4. Vigilante 
5. Chain Gang Woman 
6. Christine 
7. Murder 
8. Breathin' Down Your Neck 
9. Circle Of Fire

Line up:
James Neal: voz
Jay Reynolds: guitarra
Mick Zane: guitarra
Mark Behn: bajo
Clifford Carothers: batería
Invitados:
Dave Mustaine, Dave Ellefson, Jaime St. James, Tommy Thayer: coros en temas 2 y 5.


Sinister Double con imágenes de la banda.


Judasmetalfan